Mientras el peronismo bonaerense dirime su interna entre Cristina Kirchner y Axel Kicillof a puertas abiertas, el PRO y La Libertad Avanza transitan la etapa de negociación para conformar un frente electoral en una relativa tensa calma. Hasta ahora. Ese clima podría volverse más tenso y enrarecido en las próximas semanas por la postulación de la expresidenta, por la discusión de lugares y de nombres y por la renovada presión para sumar a dirigentes radicales.

“Lo de Cristina lo que hace es nacionalizar la elección y que haya dos polos bien marcados, sin lugar para lo local. Es decir, obliga que cada espacio tenga que poner lo mejor para septiembre. Eso cambia la lógica de las elecciones provinciales, donde tanto senadores como diputados iban casi escondidos en las listas y eran completos desconocidos para la gente”, señaló a Infobae un dirigente del PRO de la quinta sección electoral, al tanto de las negaciones con el armador libertario, Sebastián Pareja.
En este nuevo escenario, un sector advirtió que no alcanza solo con el PRO y LLA para ganarle al kirchnerismo en la provincia de Buenos Aires. Soledad Martínez, la intendenta de Vicente López y vicepresidenta del partido a nivel provincial, fue explícita en las últimas horas: “Si queremos ganar en todo el interior, si queremos ganar en el conurbano, si queremos ganarle a Cristina en el conurbano sur, solamente con el PRO y La Libertad Avanza nos vamos a quedar cortos, nos vamos a llevar una gran desilusión”.
La palabra de la jefa comunal, una de las más escuchadas dentro de la estructura partidaria, plantea un panorama y un interrogante a resolver de cara a los comicios de septiembre: si hay que armar listas ultracompetivas que puedan defender una discusión nacional, ¿hay lugar para todos? Por el momento, desde la UCR bonaerense aseguran que no hubo una convocatoria formal, pero hay varios canales informales abiertos.